Support striking mental health workers! Contribute to the Hardship Fund >>

Trabajadores de Providence organizan primer Día de Acción en el Norte de California

English

En una importante demostración de poder colectivo, más de 2,000 miembros de NUHW en hospitales y hospicios de Providence en todo el norte de California celebraron su primer Día de Acción regional el 12 de febrero para llamar la atención sobre la grave falta de personal y los fuertes recortes en los servicios de salud en las comunidades que dependen de Providence para su atención médica.

Después de años de organización exitosa, los miembros de NUHW se están uniendo en una campaña unificada para lograr que Providence proporcione salarios y beneficios competitivos para que pueda restablecer niveles seguros de personal y limitar la capacidad de Providence de recortar servicios a raíz de una serie de cierres.

“Es realmente desgarrador cómo hemos caído tan bajo en los últimos 10 años”, dijo Psyche Clark, una técnica de obstetricia que ha trabajado en el Santa Rosa Memorial Hospital durante casi tres décadas, al periódico Santa Rosa Press Democrat. “Cada vez que te das la vuelta, están cerrando algo. Y tenemos muy poco personal. Somos el centro de traumatología. Deberíamos ser los mejores”.

Gabriela Caro, programadora del centro de imágenes de Queen of the Valley, concordó que la atención bajo Providence ha sufrido desde que se hicieron cargo de las operaciones del hospital St. Joseph hace una década.

“Han estado cerrando departamentos y reduciendo personal”, dijo Caro al Press Democrat. “Los pacientes esperan más tiempo para recibir atención. Necesitamos este contrato para poder preservar los servicios y poder ser un hospital en el que la comunidad pueda seguir creyendo.

Además del Press Democrat, que publicó dos artículos sobre los piquetes locales, la acción recibió cobertura por parte de Northern California Public Media, Napa Valley Register, KSRO, KRCR, Eureka Times-Standard, Lost Coast Outpost, Redwood News TV

Providence, la quinta cadena hospitalaria sin fin de lucro más grande en la nación, se afianzó en el norte de California cuando tomó las riendas de St. Joseph Health. Ahora es propietaria de seis hospitales en la región, cinco de los cuales tienen miembros de NUHW: Santa Rosa Memorial Hospital, Petaluma Valley Hospital, Queen of the Valley Hospital in Napa, and Redwood Memorial Hospital y St. Joseph Eureka en el Condado Humboldt. Providence también tiene dos hospicios en el Condado Sonoma, ambos representados por NUHW. 

Providence tiene reservas financieras de $7,800 millones y una unidad de capital de riesgo de $150 millones, pero aún así ha despedido trabajadores y reducido drásticamente los servicios médicos disponibles desde que asumió el control de los hospitales del norte de California. Desde 2020, Providence ha cerrado sus laboratorios ambulatorios en tres condados, cerrado sus centros de maternidad en los condados de Humboldt y Sonoma, cerró la única unidad de rehabilitación en el Condado Humboldt, County, y cerró dos clínicas de atención de urgencias en el Condado Sonoma.  

También despidió trabajadores de hospicio en el Condado Sonoma, y aumentó la cantidad de casos para los trabajadores de la salud  caseloads for caregivers lo que significa que tienen menos tiempo para cuidar de cada paciente.

“Necesito poder brindarles atención de calidad a mis pacientes cuando están muriendo”, dijo Jennifer Harrison, trabajadora de cuidados paliativos de Petaluma, a la Radio Pública del Norte de California. “Si eso significa que veo a cinco o seis pacientes en una jornada de ocho horas, es un día completo y no puedo brindarles a los pacientes la atención que merecen”.

La búsqueda de elevar sus ganancias por parte Providence va más allá del Norte de California y los ha colocado en el ojo de las autoridades estatales. En Oregon, casi 5,000 enfermeras, representadas por la Asociación de Enfermeras de Oregon, se fueron a la huelga por más de un mes por problemas de “falta sistemática de personal”. 

En el estado de Washington, Providence está devolviendo $21 millones en cobros médicos y eliminando $137 millones en deuda médica para poner fin a cargos presentados por la oficina del Fiscal General del Estado de Washington después que la empresa envió a cobranzas a pacientes que calificaban para recibir atención de caridad. Y en California, el entonces Fiscal General Xavier Becerra rechazó una propuesta de fusión entre los hospitales Providence y Adventist en el norte de California, citando un “potencial para aumentar los costos de salud y potencialmente limitar el acceso y la disponibilidad de los servicios de atención médica”.

Para mejorar los niveles de personal, reducir la rotación y proteger los servicios, los miembros de NUHW están luchando por obtener salarios y beneficios comparables a los de los principales competidores regionales de Providence, Kaiser Permanente y Sutter Health, y al mismo tiempo exigir a Providence que proporcione un aviso con al menos cinco meses de anticipación antes de cerrar un servicio para que los trabajadores y los miembros de la comunidad tengan la oportunidad de manifestarse en su contra. Providence ha rechazado hasta ahora que se le obligue a proporcionar un aviso previo del cierre de un servicio y está proponiendo aumentos anuales de menos del 2 por ciento para casi todos los trabajadores.

“Providence no nos ofrece salarios de mercado por nuestro trabajo”, dijo Erica Goldsmith, fisioterapeuta de St. Joseph Eureka, a una estación de televisión local. “Mucha gente se va a lugares donde pagan mejor. Y mucha gente está aquí porque les encanta estar aquí y les encanta servir a esta comunidad, como me pasa a mí”.

Cada línea de piquete afuera de un hospital de Providence incluyó un mitin con líderes electos locales.

El mitin de NUHW frente al hospital Memorial atrajo a media decena de autoridades electas, incluyendo: los asambleístas estatales Chris Rogers, (D-Santa Rosa) y Damon Connolly, (D-San Rafael); la concejal de Rohnert Park Jackie Elward; los miembros del Concilio de Santa Rosa Natalie Rogers y Caroline Bañuelos; y el Supervisor del Condado Sonoma Chris Coursey.

Según el Press Democrat, Coursey dijo a los trabajadores que contaban con el apoyo de la “comunidad local”, durante un breve discurso en el que recordó la memoria de su difunta esposa, quien trabajaba como enfermera registrada en el Memorial Hospital. Theresa Coursey murió en la Nochevieja de 2010 tras una batalla de muchos años con el cáncer. 

“Ella nos dijo sus últimas palabras a mí y a sus hijos en One East. Esto fue hace 14 años”, dijo Coursey. “Ella trabajó aquí durante 20 años antes de eso. Ella sabía que los trabajos que ustedes hacen son los que hacen que este hospital funcione bien. Ella sabía que ustedes son la columna vertebral de este hospital. Ustedes son lo que hace que Providence siga abierto aquí”.

More from NUHW

Careers

Change-makers wanted!
Join our team